Primera batalla de Itaibaté y Ataque aliado a la posición paraguaya del río Pikiciry
21 de diciembre de1868

Antecedentes: La guerra del Paraguay

La guerra del Paraguay, iniciada en abril de 1865, llevaba mas de tres años de sangrienta lucha. El presidente del Paraguay, Francisco Solano López, estaba determinado a seguir la guerra. Las tropas aliadas argentino-brasileñas, después de la caída de la Fortaleza paraguaya de Humaita, habían avanzado desde el norte y el sur, bordeando el río Paraguay. En diciembre se libraron las batallas (los brasileños la llaman "Decembrada") de Itororó (6 de diciembre) y Avahy (11 de diciembre), y los paraguayos se vieron forzados a retirarse y fortificarse con lo que quedaba de su ejército en las posiciones de Lomas de Itaibaté (o Lomas Valentinas), al este de Angostura. En estas batallas los paraguayos perdieron unos 3.000 hombres y los brasileños unos 2.500.

El ejército brasileño, marcho a Villeta, donde se reorganizó, sumando mas de 20.000 hombres. De las fuerzas paraguayas se encontraban: 8.000 hombres fortificados en Itaibaté, 2.000 en la posición del Pikiciry y 700 en Angostura.

Primera batalla de Itaibaté

Los brasileños al mando del general Osorio iniciaron el ataque al amanecer. Habiéndose apoderado de la primera trinchera paraguaya daban por ganada la batalla, pero los brasileños en vez de desplegar sus líneas, avanzaron en cerradas columnas que eran sesgadas por el fuego de artillería y fusilería de la ya diezmada línea paraguaya. Cuando se encontraban casi a las puertas del Cuartel General paraguayo, fueron inesperadamente asaltados por el regimiento Acaamorotí, última reserva del Mariscal López, que los rechazó hasta más allá de la primera línea de trincheras. Las pérdidas brasileñas alcanzaron a 1.000 muertos y 3.250 heridos, bajas más elevadas que las sufridas por los aliados en Curupaytí. Las pérdidas de los paraguayos ascendían a la mitad de sus efectivos.

Ataque a la posición del Pikiciry

Debía efectuarse simultáneamente con el ataque a Itaibaté. El general argentino Gelly y Obes atacaría el frente de la posición y el general brasileño Menna Barreto la envolvería por el Este. Las dificultades del terreno, motivadas por las lluvias, retardaron el envolvimiento al punto que después de casi ocho horas de espera y creyendo que aquél ya no se produciría en el día, Gelly y Obes sacó sus tropas de los pantanos donde se habían aprestado y las llevó al campamento. A las 17 horas, Menna Barreto atacó de revés la posición de los paraguayos, a quienes derrotó causándoles 680 muertos y 100 heridos y tomándoles 100 prisioneros. Los restos de las fuerzas vencidas se refugiaron en Angostura.